Se requieren hidróxidos cálcicos micronizados y de alto contenido en Ca(OH)2 libre.
La cal se utiliza para la recuperación de metales como: cobre, alúmina, magnesio, cinco, plomo, oro, plata, uranio, etc…
Cada uno de los procedimientos de extracción de estos metales utiliza la cal para separar las impurezas floculadas y las sales metálicas por técnica de flotación.
En la regeneración del mercurio se utiliza la cal para eliminar el azufre, utilizándose asimismo en la recuperación de oro y plata para controlar el pH.