En los procesos de flotación se utiliza la cal para separar las impurezas de las diferentes sales metálicas, así como para regular el pH de las aguas utilizadas a lo largo del proceso de fabricación.

Como fundente se utiliza en la fundición del cobre, el plomo y el zinc.

También se utiliza en las producciones de magnesio y en la producción de aluminio como escorificante.